La frustración, se produce cuando no se cumplen las expectativas, que uno tiene sobre algo, produciendo irá, decepción, tristeza, desánimo y venganza entre otros sentimientos de impotencia. Pero Dios tiene el antídoto para combatirla, guiandonos en la actitud que debemos tomar para darle el manejo adecuado.Job 6:11; Job 7:3 Versículos que anulan la frustración entre otros: Isaías 41:10:10; Salmo 34:18; Juan 16:33; Mateo 11: 28-29; Josué 1: 9:9.