“A pesar de que el cristianismo parece en un principio tratar sólo de moralidad, sólo de reglas y deberes y culpa y virtud, nos conduce más allá de todo eso hasta algo que lo trasciende.”
“Entonces se sabía únicamente que cada instante trae consigo un deber, que es preciso cumplir con fidelidad, y esto era suficiente para los hombres espirituales de entonces.”